Qué hacer con un niño hiperactivo
La hiperactividad es una afección de origen neurobiológico pero estudios recientes demuestran que la hiperactividad en niños también está relacionada con las condiciones donde éste vive, y en caso de que estas no sean las adecuadas la situación de hiperactividad puede empeorar. Estos estudios dejan bien clara la importancia que tiene el ambiente en que vive el niño, el cual debe ser agradable y adecuado para su crianza.
El trato con un niño hiperactivo debe de ser muy cuidadoso y con mucha calma. Es muy importante que todos los logros que tenga el niño sean reconocidos y valorados por los padres, y no ver siempre todo lo malo que él hace. Si tenemos un comportamiento positivo frente a él notaremos que tratará de cambiar su actitud frente a los adultos, mejorando.
En caso que el niño hiperactivo tenga hermanos es necesario que los padres le dediquen el tiempo necesario para atender las necesidades y darle cariño a cada uno. Si se atiende a un niño más tiempo que otro surgirán los celos ocasionando un problema aún mayor.
Es muy necesario que el niño hiperactivo viva lo más tranquilo posible y sin cambios. Un niño hiperactivo no puede estar mucho tiempo quieto en clase tampoco: esto lo debe entender el maestro teniendo que ser paciente con él. Aunque el niño tenga esta afección es importante que se le pongan los límites que corresponden al igual que cualquier niño.
En las primeras etapas del aprendizaje del niño, la educación tiene mucho vínculo con la conducta y a estos niños se les pueden ofrecer actividades que lo lleven a estar tranquilo por más tiempo como pintar o hacer una manualidad.