Una de las cosas más sorprendentes –o absurdas, como prefieras– de Superman es que pueda esconder su identidad detrás de un par de anteojos. Puede parecernos irreal que un simple rio tenga el poder de cambiar por completo su semblante, sin embargo, este caso no es exclusivo del mundo ficticio del hombre de acero, sino también es algo que se experimenta en la vida real.