Ángel del Villar, dueño de la disquera Del Records, es declarado culpable de hacer negocios con narcotraficante sancionado
Ángel del Villar, dueño de una disquera de música regional mexicana, fue declarado culpable tras un juicio que se desarrolló durante dos semanas en una corte federal de Los Ángeles, California. La Fiscalía lo acusó de haber hecho negocios indebidamente con un promotor de conciertos en México que supuestamente lavó dinero de un peligroso cartel.
La agencia de talentos Del Entertainment, propiedad de Del Villar, también fue enjuiciada por los mismos señalamientos y fue declarada culpable.
El productor musical seguirá libre bajo fianza hasta el día de su sentencia, el viernes 15 de agosto.
Familiares y empleados de Del Villar lo abrazaron y lloraron afuera de la sala 1. El empresario se lo tomó con tranquilidad. “Si yo no me miro agüitado, no se agüite”, consoló Del Villar a su hijo, quien derramaba lágrimas. “Esperé cinco años para esto, yo estoy tranquilo”, les dijo a los presentes.
A Del Villar y a su agencia, ligada a la disquera de narcocorridos Del Records, les impusieron más de una decena de cargos, incluyendo conspiración para realizar transacciones con un narcotraficante designado y haber hecho negocios indebidos con éste por un monto total de 3.5 millones de pesos (alrededor de 175,000 dólares).
Estos delitos conllevarían una condena de hasta 30 años de prisión, advirtió el Departamento de Justicia.
Al salir del tribunal, el abogado defensor Drew Findling, acompañado de su cliente, dijo que apelarán este veredicto.
“Obviamente estamos decepcionados, pero esto es una lucha larga… Habrá una apelación muy detallada y compleja, porque estamos cien por ciento seguros de que él es inocente”, expresó el litigante.
Por su parte, Del Villar, visiblemente sereno, dijo estar de buen ánimo y, de alguna manera, satisfecho de que, a su parecer, se confirmó que no ha lavado dinero del crimen organizado.
“Prefiero mil veces estar sentado en una reja, en mi casa… que estar como informante del gobierno”, declaró ante los periodistas. “Yo quería venir al juicio, yo sí vine a confrontar esto. No me senté a negociar o a firmar para no confrontar las consecuencias”.
El caso se enfocó en tres conciertos que el cantante de corridos Gerardo Ortiz ofreció en Aguascalientes, Baja California y Guanajuato, y en un cuarto show en Chiapas que fue cancelado. Estos eventos ocurrieron en 2018 y 2019.
El juicio de Del Villar y la designación de ‘Chucho’ Pérez han arrojado luz sobre lo más turbio del mundo de la organización de conciertos en México, revelando cómo el brazo del narcotráfico también estaría metido en esta millonaria industria.
Gerardo Ortiz fue el testigo estrella del juicio y, en dos días de testimonios, aseguró que Del Villar lo engañó para que acudiera en abril de 2018 a la Feria de San Marcos, en Aguascalientes, México.
Así cumplió con un contrato que tenía con el promotor de conciertos Jesús Pérez Alvear, alias 'Chucho' y quien presuntamente lavaba dinero del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de su brazo financiero, Los Cuinis.
Ortiz se declaró culpable de un cargo de conspiración por violar la Ley Kingpin, aceptando que hizo negocios con Pérez Alvear. Ahora espera que su sentencia sea menos severa por haber cooperado con el Departamento de Justicia.
Del Villar es originario de México y su disquera produjo la exitosa canción 'Ella baila sola', que catapultó la carrera del artista Hassan Emilio Kabande Laija, mejor conocido como Peso Pluma.
Agentes del FBI arrestaron a Del Villar en junio de 2022, tras una investigación que se inició cuatro años atrás, desde que Pérez Alvear fue sancionado por el Departamento del Tesoro.
En el juicio se presentó evidencia que, según los fiscales federales, confirmó que Del Villar y Pérez Alvear siguieron haciendo negocios a pesar de dicha designación. Por ejemplo, esta conversación que ambos sostuvieron vía mensajes de texto el 1 de febrero de 2019.
- “¿Cómo estás? Mándame una cuenta (bancaria) y te haré el depósito ahora mismo, así el artista (Gerardo Ortiz) puede recibir su pago por (el concierto de) Chiapas y por el de mañana”, escribió Del Villar.
- “No, mi amigo, pero yo ni tengo cuentas (de banco). Te haré el favor y luego nos arreglamos”, respondió Pérez Alvear.
Aunque el show en Chiapas jamás se llevó a cabo, la Fiscalía consideró que esta charla había sido parte de la conspiración.
"El acusado sabía que 'Chucho' Pérez estaba sancionado y siguió haciendo negocios con él de cualquier manera", dijo en los argumentos finales, este miércoles, el fiscal federal Ben Balding.
El palenque de San Marcos
A decir del fiscal Balding, la relación comercial entre el dueño de Del Records y el promotor de conciertos tenía un "valor alto", por eso el primero tomó el riesgo de ignorar las medidas impuestas por el Departamento del Tesoro.
"'Chucho' era una persona con poder a la que no podías persuadir", enfatizó.
Otra prueba clave presentada en el juicio fue el concierto que dio Gerardo Ortiz a finales de abril de 2018 en la Feria de San Marcos, en Aguascalientes. Varios artistas y grupos musicales amenizaron ese palenque, contratados por la promotora Gallística Diamante o 'Ticket Premier', también sancionada por el gobierno estadounidense.
En esa cartelera también estuvieron Alejandro Fernández, Marco Antonio Solís, Carlos Rivera, Reik, Los Tucanes de Tijuana, Calibre 50, Pancho Barraza, Lupita D’Alessio, Alfredo Olivas, entre otros. Ninguno de ellos ha sido acusado por las autoridades.
Después de ese palenque, Ortiz cantó en otros 18 conciertos en México que organizó Pérez Alvear. Por estos shows, el artista se embolsó 1.5 millones de dólares. Del Entertainment se quedaba con el 20% del pago total y 'Chucho' Pérez se llevaba el 10%, se reveló en la corte.
En clave, el dueño de Del Records se refería a su socio con el alias de 'Pedro' y al asistente de éste con el apodo de 'Pollo', aseguró la Fiscalía.
"Acabo de hablar con 'Pedro' y si él quiere trabajar directamente con el artista (Gerardo Ortiz), eso no será un problema. Pero tenemos que aclarar todas las cuentas que están pendientes", escribió Del Villar en un mensaje de texto que fue interceptado por el FBI.
Pero los abogados defensores de Del Villar alegan que se trata de dos promotores llamados Pedro, uno de los cuales contrató a Ortiz para que diera nueve conciertos en EEUU en 2018 y otro que organizó un evento en Arcelia, en el estado mexicano de Guerrero.
"No hay evidencia de que Ángel del Villar sabía que 'Chucho' Pérez estaba involucrado con ninguno de los shows de Ortiz", declaró el abogado defensor Drew Findling, al dar sus argumentos finales el miércoles.
"No hay ningún mensaje de texto, llamada o correo electrónico que demuestre que Ángel del Villar actuó deliberadamente y con conocimiento de que su conducta fue ilegal", agregó el litigante.
El testimonio de Gerardo Ortiz
En dos días de testimonios, Ortiz narró cómo agentes del FBI lo interceptaron en el aeropuerto de Phoenix, Arizona, para advertirle que no fuera a la Feria de San Marcos por las sanciones contra Pérez Alvear.
El cantante inventó mil pretextos para perder el vuelo que lo llevaría a dicho evento. Pero quienes manejaban su carrera rentaron un jet privado por casi 50,000 dólares (la mitad del cobro de la presentación) para transportarlo a la ciudad de Aguascalientes.
“Tenía miedo de ir. Perdí el vuelo, se hizo tarde. Entonces la única manera que pudiera llegar allá era en avión privado”, contó Ortiz en el tribunal.
“Tenía como esa preocupación de este papel que me habían dado y es por eso que decidí no subirme al avión comercial”, continuó Ortiz, refiriéndose a un documento de la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC), una dependencia del Departamento del Tesoro, que le habían entregado los agentes del FBI.
Con el respaldo del cartel, Pérez Alvear obtenía concesiones para llevar talento artístico a ferias populares. Gracias a él, el CJNG también había metido las manos en la Feria de San Isidro Metepec, en el Estado de México, asegura la OFAC.
“Chucho Pérez utiliza la violencia para obtener concesiones y operar estos conciertos”, advertía la dependencia en un comunicado, indicando que lavó el dinero del cartel “mezclándolo con ingresos legítimos generados por la venta de boletos, alimentos, estacionamiento y otros artículos”.
Antes de viajar a regañadientes a la Feria de San Marcos, el cantante Gerardo Ortiz conversó en persona con Del Villar y le dijo que el dueño de Gallística Diamante estaba en la mira del gobierno, según su testimonio.
“Le platiqué que no quería ir al concierto. Estaba, pues, asustado”, testificó.
Para convencerlo de que todo estaba bajo control, narró Ortiz, Del Villar le aseguró que nadie había cancelado su participación.
“Lo tomaron así, que no me preocupara, que todos habían recibido la misma carta (de la OFAC), que incluso Alejandro Fernández”, testificó Ortiz. “Obvio que tengo respeto a los grandes artistas y, al decir que todos habían recibido la carta, para mí se minimizó el problema. Dije: si todos van a ir, por qué yo no voy a ir”.
La investigación del FBI
El FBI se metió a las entrañas de la disquera Del Records, analizó los correos electrónicos de todos su empleados, revisó las cuentas bancarias del sello y las de su dueño, interceptó conversaciones en WhatsApp, espió celulares e incluso entrevistó al dueño de la compañía que le rentó a Del Records el avión privado que transportó a Ortiz hasta la ciudad de Aguascalientes.
Pero hubo un informante clave, Brian Gutiérrez, quien era vicepresidente de asuntos externos de la disquera. Gutiérrez grabó conversaciones de empleados de Del Records, reportó lo que pasaba en sus pasillos y compartió documentos a los detectives del FBI. Lo hizo durante tres años y, por su colaboración, recibió un pago de alrededor de 25,000 dólares.
En el juicio, los abogados de Ángel del Villar aseguraron que estas acusaciones eran falsas y culparon a Gutiérrez, el informante clave del FBI, de montar un complot en contra de su cliente. Aunque estaba en la lista de posibles testigos, Gutiérrez no fue llamado al estrado. "Lo escondieron de ustedes", reclamó el abogado defensor dirigiéndose al jurado. "Eso fue lo más decepcionante de este caso".
Otros testigos que fueron descartados son el cantante de corridos Lenin Ramírez y el hermano de Del Villar, Manuel del Villar, a pesar de que la Fiscalía anticipó al inicio del juicio que éste ratificaría esta declaración que dio anteriormente: "mi hermano lava dinero del cartel". Y se señaló que Manuel del Villar también habría asegurado que su hermano usó los conciertos de sus artistas para blanquear dinero del narcotraficante Joaquín 'El Chapo' Guzmán.
En documentos judiciales sometidos antes del juicio, los fiscales también indicaron que se escucharía en la corte el testimonio de "un narcotraficante" no identificado, pero ese personaje nunca subió al estrado.
Tampoco se profundizó en el tribunal sobre las presuntas actividades criminales de Pérez Alvear. Desde que el Departamento del Tesoro lo ahorcó financieramente en 2018, éste trató de limpiar su nombre y el de su promotora, pero jamás lo logró.
En tres ocasiones se reunió con el agente Matthew Zito, quien es parte de un equipo especial que investiga a organizaciones de narcotraficantes mexicanos que operan en Los Ángeles. Se vieron dos veces en la Ciudad de México y una tercera en Guadalajara.
Al final, 'Chucho' Pérez decidió cooperar con el Departamento de Justicia para reducir su castigo. Se declaró culpable de haber hecho transacciones ilícitas en nombre del Cartel de Jalisco y estaba listo para testificar en contra de Del Villar.
Pero en diciembre pasado, tres meses antes de que iniciara el juicio del dueño de Del Records, dos sicarios que se cubrían el rostro con cascos de motociclistas se acercaron a la mesa donde comía 'Chucho' Pérez, en un lujoso restaurante en la Ciudad de México, y lo mataron a balazos.